[14/06/2016] Las marcas más reconocidas en el mercado de los centros de datos y las nubes ahora están compitiendo para dominar el emergente campo de batalla TI en fábricas, vehículos y plantas de energía.
La llamada Internet de las cosas industrial demanda la recolección de los datos y su análisis en los bordes de las redes empresariales, en donde los sistemas convencionales no serían eficientes ni suficientemente resistentes. Las conocidas empresas de TI, como IBM y Dell, afirman que ahora pueden cumplir con esos requerimientos.
El reto es dar sentido a grandes cantidades de datos que vienen de sensores en equipos industriales y actuar sobre lo que los datos revelan. Podrían alertar a las empresas sobre problemas inmediatos o proporcionar un conocimiento a largo plazo sobre cómo funcionan las cosas. Por ejemplo, la IoT puede decir a las empresas el momento en el que las piezas se desgasten para que puedan reemplazarlas antes de que los sistemas fallen.

El miércoles pasado, Hewlett Packard Enterprise realizó su más reciente apuesta para este espacio con lo que denomina los primeros sistemas convergentes para IoT. El Edgeline EL1000 y EL4000 son sistemas basados en Intel Xeon con características de cómputo, almacenamiento y captura de datos incorporadas. Ellos complementan una línea de productos lanzada a finales del año pasado. Los sistemas llevan la potencia de un centro de datos completo hacia el borde de la red en un hardware que puede instalarse sobre cualquier lugar, afirmó HPE.
La presentación llegó una semana después de que la rival Cisco Systems se asociara con IBM para su más reciente iniciativa en este mismo campo. La compañía anunció que la analítica de IBM Watson ahora funcionará en los ruteadores, switches y servidores de Cisco. Dell también tiene una línea de sistemas de computación de borde.
HPE afirma que sus sistemas convergentes son superiores porque permiten a las empresas tener más funciones en el borde, donde son más necesarias. Esto es importante cuando se requieren decisiones rápidas y no hay tiempo para enviar los datos a la nube.
En lugar de simplemente filtrar los datos entrantes y enviar la información más importante a la nube, estos sistemas pueden hacer la mayoría de la analítica profunda justo en el borde, afirmó Tom Bradicich, vicepresidente y gerente general de servidores y sistemas IoT. También pueden conectarse a nubes y centros de datos privados para los clientes que desean utilizarlos.
El EL4000, el más grande de los dos nuevos sistemas de HPE, se puede configurar con hasta 64 núcleos Xeon y GPU integradas. Eso es una clase por encima del poder de cómputo de los switches y ruteadores, afirmó Bradicich.
Los sistemas de HP también dan a las empresas más formas de personalizar la computación de borde, con chips x86 para aplicaciones de terceros e interfaces PCI Express para agregar las tarjetas de hardware de terceros.
Flowserve, fabricante de productos de gestión de flujos como bombas y válvulas, integrará los sistemas Edgeline con algunos de sus productos, afirmó Eric van Gemeren, vicepresidente de I+D de Flowserve.
Los clientes de Flowserve necesitan hacer mucha analítica en el borde porque tienen demasiados datos para enviar a la nube, afirmó van Gemeren. Por ejemplo, un sensor de bomba puede realizar mediciones 50 veces por segundo, afirmó van Gemeren. Puede haber seis de esos sensores en una bomba y cinco mil de estas bombas en una refinería de petróleo.
Además, una falla en el lugar puede cortar la conexión de red de las instalaciones justo en el momento en el que más se necesita la analítica de los datos, afirmó.
A pesar de lo capaces que pueden ser los sistemas de borde de HPE, tendrán que encajar en grandes plataformas industriales construidas para las necesidades de clientes específicos. Como sus rivales, HPE está alineando socios para el desarrollo de éstos. Entre ellos se encuentran GE Digital, National Instruments y PTC.
Stephen Lawson, IDG News Service